Dos estudios publicados en JAMA Cardiology revelan que el daño que puede causar COVID-19 va más allá de los pulmones, los intestinos o los riñones.
Al parecer, la infección por el nuevo coronavirus puede tener un impacto prolongado en la salud cardíaca de las personas recuperadas, y puede haber causado infección en el corazón en aquéllos que murieron a causa de COVID.
Por eso los médicos llaman a COVID-19 ya no una infección respiratoria, sino una infección múltiple.
Una de las investigaciones analizó la salud cardíaca de 100 adultos recuperados de COVID-19. Y halló que el 78% mostraba síntomas de algún tipo de problema cardíaco, incluida inflamación.
Estos 100 pacientes son adultos de entre 45 y 53, que estaban registrados en el sistema de notificación de casos de COVID-19 en Alemania, y se habían recuperado mayormente en sus casas, de formas de la infección de leves a moderadas.
El otro estudio analizó autopsias de pacientes fallecidos por COVID y comprobó que había coronavirus en el tejido cardíaco.
El trabajo incluyó a 38 autopsias de pacientes fallecidos en Alemania entre el 8 y 18 de abril. Dieciséis de ellos tenían virus en sus corazones. En este caso los pacientes eran