Para la primera celebración se escogió la fecha del 5 de septiembre para coincidir con la reunión de los Caballeros del Trabajo, la federación laboral más progresista en aquella época en el país y el proceso fue totalmente independiente a las huelgas iniciadas en Chicago en 1886.
Aunque cada año el 1 de mayo, trabajadores de casi todo el mundo celebran el Día In-ternacional de los Trabajadores. Un día marcado en rojo en el calendario desde hace más de un siglo y que a día de hoy sigue siendo el día más importante para los sindicatos de todo el mundo. Excepto para los Estados Unidos.
En Estados Unidos, el Día del Trabajo – ‘Labor Day’ – se celebra el primer lunes de septiembre. Una curiosa diferencia que podría pensarse que tiene que ver con las décadas de la Guerra Fría entre el país de las barras y estrellas y la Unión Soviética, donde el primero de mayo tuvo un peso primordial.
Pero no, esta diferenciación viene de mucho más allá, y es especialmente llamativa teniendo en cuenta que hubo unos altercados durante una huelga en Chicago en 1886. Los que sembraron la base del actual Día del Trabajo que celebran en América Latina y en casi todos los países excepto el norteamericano.
Oregón, el primer estado en reconocer el ‘Día del Trabajo’
Nueva York fue el primer estado en presentar un proyecto de ley, pero Oregón fue el primero en aprobar una ley que reconoce el Día del Trabajo, el 21 de febrero de 1887.
Durante 1887, cuatro estados más (Colorado, Massachusetts, Nueva Jersey y Nueva York) aprobaron leyes que creaban un feriado del Día del Trabajo. A finales de la década, Connecticut, Nebraska y Pensilvania habían seguido su ejemplo. Para 1894, 23 estados más habían adoptado el feriado.
En 1887, el presidente estadounidense Grover Cleveland estableció el Día del Trabajo en septiembre como feriado oficial. Historiadores coinciden en que el motivo por el cual decide celebrar en septiembre fue para evitar que el 1° de mayo sirviera como glorificación de los «mártires de Chicago».
Fue el 28 de junio de 1894, cuando el Congreso aprobó una ley para hacer feriado el primer lunes de septiembre de cada año para celebrar el Día del Trabajo.