Los nuevos objetivos en materia de energía limpia se hicieron públicos en una rueda de prensa en la “Conferencia sobre el cambio climático de las Naciones Unidas”, conocida como COP27, celebrada en Sharm el-Sheikh, Egipto
México anunció que planea aumentar drásticamente la cantidad de energía que genera a partir de fuentes renovables sumando más de 30 gigavatios adicionales de generación anual de electricidad a partir de la energía eólica, solar, geotérmica e hidroeléctrica para 2030.
Los nuevos objetivos en materia de energía limpia se hicieron públicos en una rueda de prensa en la “Conferencia sobre el cambio climático de las Naciones Unidas”, conocida como COP27, celebrada en Sharm el-Sheikh, Egipto. Para finales de la década, México se planteó como objetivo generar más de 40 gigavatios de energía recurriendo a la fuerza eólica y la potencia solar.
Desde 2019, México tenía 80 gigavatios de capacidad instalada de generación de electricidad, según la Administración de Información de Energía de los Estados Unidos. La mayoría proviene del gas natural, de manera que las energías renovables representan el 10 % y la energía hidroeléctrica el 7 %. Eso significa que, si el país cumple este nuevo objetivo, lograría un cambio considerable en su cartera de energía, convirtiéndola en gran parte en renovable.
John Kerry, el enviado presidencial especial de Estados Unidos para el cambio climático, se unió al secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, en la conferencia de prensa del lunes.
“El secretario Kerry ratificó su apoyo al nuevo objetivo renovable de México. Estados Unidos tiene la intención de trabajar estrechamente con México para lograr esas metas ambiciosas, incluso brindando apoyo financiero y realizando un esfuerzo conjunto para catalizar e incentivar las inversiones que sean necesarias para la implantación y transmisión de las nuevas energías renovables mexicanas”, informó la Embajada de Estados Unidos en México.
México es el decimotercer mayor emisor mundial de gases de efecto invernadero. Sin embargo, ha sido uno de los pocos países que actualizó su plan para reducir las emisiones en la COP27, comprometiéndose a disminuir las emisiones en un 35 % desde los niveles actuales para 2030. Los objetivos de energía renovable están pensados para alcanzar esa meta.
Kerry ha estado trabajando para persuadir a los grandes países en vías de desarrollo para que tomen nuevas medidas para descarbonizar sus economías y les ha ofrecido su ayuda.