Llevar una hoja de tu árbol del zodíaco en una bolsita de tela verde, constituye un eficaz amuleto de protección, su fuerza esotérica está tan presente que actúa por sí misma y no requiere de sugestión o rituales para producir sus beneficiosos efectos
En estos tiempos que corren, el hombre se siente cada vez más inclinado a respetar y disfrutar de la naturaleza: Sentarnos bajo un árbol o tocarlo por un rato, nos revitaliza y nos trae serenidad. Todo nuestro organismo, y por ende nuestra mente, se ven altamente favorecidos cuando establecemos contacto con los árboles, aumentando nuestra vitalidad y salud gracias a ellos.
Los antiguos no los consideraban con simpleza: formaban parte de sus mitos y prácticas mágicas, de su vida cotidiana y sus usos medicinales.
Conocían aquellos árboles que curaban y los que mataban, cuáles les protegían de los rayos y cuáles los atraían. Ellos creían que cada árbol albergaba su “alma”, un espíritu que le confería una fuerza determinada.
Y esa fuerza se manifiesta sutilmente a través del hombre y el zodíaco, ya que cada signo tiene marcados “lazos” con los árboles y sus hojas.
Llevar una hoja de tu árbol del zodíaco en una bolsita de tela verde, constituye un eficaz amuleto de protección, su fuerza esotérica está tan presente que actúa por sí misma y no requiere de sugestión o rituales para producir sus beneficiosos efectos.
El árbol es un símbolo ancestral que representa a la vida en perpetua evolución y, en especial, a la vida del reino vegetal.
Los árboles ponen en comunicación los tres niveles del cosmos. En el nivel subterráneo, encontramos a las raíces hundiéndose y penetrando en las profundidades. En el nivel de la superficie, encontramos al tronco y sus primeras ramas. En el nivel celestial encontramos a las finas ramas y verdes hojas mirando la luz mientras son acariciadas por el viento.
El árbol está relacionado con los 4 principales elementos:
El Agua circula por su savia
La Tierra se integra en su cuerpo mediante las raíces.
El Aire alimenta sus hojas
El Fuego surge de su frotamiento
Son los árboles que dan verdor al mundo. Simbolizan la energía vital de la tierra misma y son símbolos de regeneración perpetua. Es el arquetipo sobre el cual se construye el eje cósmico tribal, la proyección en lo absoluto de una imagen tribal. Es el árbol convertido en eje del mundo.
El trébol de 4 hojas se ha consagrado como el amuleto más popular para la buena suerte. Trascendiendo tiempos y distancias, su asociación con la buena fortuna se remonta a culturas milenarias.
Desde tiempos de los griegos y los romanos, el laurel ha sido asociado con la inmortalidad, se considera protector y purificador de ambientes, ahuyenta el mal y las energías negativas y hasta hay quienes creen que se le puede usar en exorcismos y contra maldiciones.
Los romanos coronaban a su César con hojas de laurel, no sólo porque le auguraba fortuna en su mandato y para señalar que era el líder lleno de triunfo y sabiduría, sino también porque supuestamente le otorgaba el poder de la clarividencia, para comprender de antemano cuál era el mejor destino para su pueblo.
Hasta nuestros días estamos acostumbrados a decir que una persona ha sido laureada o coronada de laureles cuando se le ha recompensado o premiado con honores por alguna buena labor o acción, y decimos que alguien ha obtenido laureles cuando nos referimos a premios o triunfos.
Aries y el Roble
El Roble, con su solidez, es la representación total de Aries y su valentía.
En la antigüedad, los hombres se abrazaban a este árbol antes de ir a la guerra y llevaban sus hojas junto con su espada; sus hojas servirán como ayuda en casos legales o negociaciones.
Tauro y el Cedro
Las hojas de Cedro son la compañía ideal para los nativos de este signo, y entre sus propiedades, tal vez la más importante sea que protege el hogar de robos, incendios y situaciones de violencia.
Géminis y el Olivo
El Olivo representa la inteligencia y la sofisticación de Géminis, su fuerza espiritual sus hojas y brindan su ayuda a quienes estén dispuestos a recibirla, sobre todo en aquellas tareas de índole intelectual.
Cáncer y el Nogal
El Nogal representa la nobleza y la pasión, sus hojas ayudarán a los nativos del signo a incrementar su potencia sexual.
Leo y el Algarrobo
Las hojas de Algarrobo ayudarán a los nativos de Leo en materia económica, ya que representan la ambición y las cuestiones materiales.
Virgo y el Saúco
El árbol tutelar de este signo es el Saúco, y representa al sanador: tiene propiedades medicinales y otorga longevidad a aquellos que protege.
Libra y el Ciruelo
El elegante Ciruelo es el aliado verde de los Libra, potencia la autoestima y las actividades creativas.
Escorpión y la Higuera
Las hojas de Higuera, austeras pero resistentes, son el símbolo de los Escorpión, y como el Ave Fénix, ayudarán a los nativos a “renacer de sus cenizas”.
Capricornio y el Pino
Se vincula el Pino con los Capricornio; de naturaleza noble y resistente, sus hojas resultan ideales para liberar la energía contenida y alejar malos espíritus.
Acuario y la Vid
Las hojas de Parra, o Vid, son ideales para armonizar el ambiente y favorecen la armonía para el espíritu contradictorio de estos nativos.
Piscis y el Sauce
El Sauce y su melancolía está identificado con los Piscis, sus hojas ayudarán a calmar el nerviosismo, a reducir el estrés e incluso a dormir mejor. Las hojas y su lenguaje secreto y aliado del hombre, acaso sean el mejor símbolo existente para identificarlo con la naturaleza humana, tras emerger de la tierra tienden hacia el cielo sus manos, tan cerca de lo humano como lo divino.